Fatiga en la conducción y consejos para prevenirla.

Fatiga en la conducción: consejos y recomendaciones

Según la DGT, el 20-30% de los accidentes de tráfico se relacionan de alguna forma con la fatiga en la conducción. Uno de los principales factores de riesgo es conducir sin descansar durante un largo periodo de tiempo, pero también existen otras causas que favorecen su aparición, como el estado de la carretera o el tiempo.

    A pesar de que la mayoría de los conductores conocen sus terribles consecuencias, no todos saben cómo combatir la fatiga al volante. En Athlon nos preocupamos por tu seguridad en la carretera y, por este motivo, te explicaremos los efectos que tiene el cansancio en la conducción y te daremos 10 consejos sobre cómo se pueden prevenir.

    Fatiga en la conducción: ¿Cuáles son sus efectos?

    La fatiga en la conducción es mucho más que sentirse cansado al volante, se trata de una condición que puede suponer un efecto devastador en la seguridad vial. Sin duda, se convierte en un factor de riesgo en la carretera por lo que conviene detenerse a descansar tan pronto como sea posible. 

    El mayor problema del cansancio al volante es que a veces es difícil de detectar y, por ello, la Dirección General de Tráfico insiste en la necesidad de una formación adecuada. Entre los principales aspectos a observar para detectar a tiempo los síntomas de fatiga al conducir son los siguientes:

    Visión

    • Visión borrosa que dificulta el enfoque de los objetos en el campo visual y una menor agudeza visual.
    • Mayor número de parpadeos y su duración por lo que los ojos permanecen cerrados por más tiempo, llegando incluso a quedarse dormido ya que no se puede controlar.
    • Alteraciones ópticas como luces, brillos, sombras o deformaciones de la carretera.

    Audición

    • Respuestas bruscas ante sonidos imprevistos.
    • Menor sensibilidad a los sonidos del tráfico, e incluso, del propio vehículo.

    Sensaciones corporales

    • Pequeñas migrañas y presión en la cabeza, sobre todo, en las sienes.
    • Dolor en la nuca, las cervicales,la espalda…
    • Hormigueos, calambres, picores… en manos, brazos y piernas.

    Otras alteraciones

    • Movimientos más lentos y menos exactos.
    • cambios posturales con mayor frecuencia, bostezos y otros gestos como rascarse, llevarse la mano a la pierna o llamadas de atención, como cantar o silbar.
    • Mayor desgana y conducción automatizada.
    • Comportamientos más peligrosos y actitud más irritable y agresiva.
    • Mayor tiempo de reacción.

    Consejos y recomendaciones para prevenir la fatiga en la conducción

    La fatiga al volante tiene diversos factores de riesgo que pueden provenir del propio conductor -las prisas, el cansancio, las posturas…-, el vehículo -falta de ventilación, mala iluminación, posición poco ergonómica…- o por factores externos, como el estado del tráfico, el tipo de firme de la carretera, las condiciones climatológicas…

    Sea como fuere, son aspectos que se pueden evitar para lograr conducir de forma segura. Y, por ello, desde Athlon queremos darte 10 consejos para prevenir la fatiga en la conducción:

    1. Planifica el trayecto antes de salir. Ser consciente del tiempo que te llevará llegar al destino hará que no tengas presión ni prisas por llegar y reducirá el estrés durante el viaje.
    2. Duerme lo suficiente , sobre todo, si se trata de un viaje largo. Lo más recomendable es dormir unas 7-8 horas la noche anterior puesto que se ha demostrado que dormir menos de 6 horas triplica el riesgo de tener un accidente de tránsito.
    3. Si viajas con compañía, comparte horas de conducción y así ambos podréis descansar.
    4. Realiza paradas regulares de mínimo 15 minutos. La DGT aconseja descansar cada dos horas o cada 200/300 kilómetros, ya que conducir durante un largo periodo reduce la atención y aumenta el aburrimiento. Detén tu camino y aprovecha para refrescarte, caminar un poco, hacer estiramientos, despejar la vista,… Este tiempo debe ser menor si conduces de noche o vas en moto.
    5. Conduce sin tensión dado que los nervios aumentan la fatiga en la conducción.
    6. Come algo ligero y de fácil digestión y evita las comidas copiosas porque pueden producir somnolencia. Jamás deben ir acompañadas de bebidas alcohólicas y tampoco se recomienda tomar bebidas gaseosas o excitantes.
    7. Mantente hidratado. La falta de hidratación conlleva una menor atención en la carretera, debilidad muscular… 
    8. Utiliza sistemas de asistencia a la conducción, como las alertas de salida de carril, detección de ángulo muerto, control crucero, frenada de emergencia automática, reconocimiento de señales de tráfico, entre otros.
    9. Ventila el coche y mantén una temperatura agradable.
    10. Aprende a reconocer los primeros signos de fatiga para, de este modo, no llegar al agotamiento extremo. Si te sientes cansado o el sueño comienza aparecer, no lo ignores y detén el vehículo en un lugar seguro -como un área de descanso o gasolinera- para poder descansar. 

    En definitiva, la seguridad vial es responsabilidad de todos y la fatiga en la conducción es un problema muy serio que se puede prevenir. Con estas 10 recomendaciones podrás reducir el cansancio al volante y garantizar tu seguridad y la del resto de usuarios de la vía.