Esto pone de manifiesto la imperiosa necesidad de establecer mecanismos de prevención de estas conductas al volante para reducir el número de accidentes. En este sentido, la concienciación sobre la gravedad de estas acciones y la promoción de hábitos seguros en la carretera son fundamentales para mejorar la seguridad vial. Además, la implementación de medidas educativas y sancionadoras puede ayudar a disuadir conductas de riesgo al conducir.
¿Por qué es tan importante la prevención de estas conductas al volante?
Nuestro tiempo de respuesta se sitúa en torno a 1 segundo. Es el intervalo que necesitamos para recibir, procesar la información y actuar en consecuencia. Un intervalo que resulta esencial y que puede ser determinante para prevenir accidentes de tráfico.
Sin embargo, no podemos asumir que todos los conductores van a comportarse de la misma manera ni van a tardar el mismo tiempo en reaccionar. Por eso, siempre es recomendable realizar una conducción preventiva, orientada a anticipar y prevenir potenciales peligros en la carretera, buscando reducir el riesgo de accidentes de tráfico y mejorar la seguridad vial.
Se trata de estar mejor preparados para reaccionar ante cualquier imprevisto en la carretera. Para ello, es necesario mantenerse alerta, saber en todo momento qué es lo que tenemos alrededor y evitar conductas de riesgo al conducir, como estar atentos a otros usuarios de la vía y a los distintos obstáculos que puedan surgir.
Gracias a ello, podemos reducir considerablemente las posibilidades de sufrir un accidente de tráfico y mejorar nuestra seguridad en la carretera, pero también puede ahorrarnos costos en el mantenimiento del vehículo y en las pólizas de seguros.
Cómo evitar conductas de riesgo al conducir
Manejar un vehículo va más allá de conocer su funcionamiento. Implica responsabilidad, paciencia y actitud. En este sentido, uno de los aspectos más importantes para garantizar el éxito en la conducción es cumplir con las normas de tráfico y seguridad.
Sin embargo, nuestra seguridad no depende únicamente de nuestra conducta, sino también de la del resto de usuarios de la vía. Adoptar buenas prácticas y evitar conductas de riesgo como las que explicamos a continuación ayudará a prevenir accidentes y mejorar la seguridad vial.
9 buenas prácticas para mejorar la seguridad vial
- No usar el móvil: El uso del teléfono móvil al volante es más común de lo que muchos imaginan, lo que puede incrementar significativamente el riesgo de accidentes. Es crucial tener en cuenta que está estrictamente prohibido utilizar el teléfono incluso cuando nos detenemos en semáforos, y manipularlo aunque esté colocado en su soporte puede resultar en una multa, salvo en áreas de estacionamiento o cuando se utiliza el sistema de manos libres.
- Evitar el consumo de bebidas alcohólicas o estupefacientes antes de conducir: se trata de una de las conductas de riesgo más peligrosas. Estas sustancias deprimen el sistema nervioso central, afectando negativamente a la percepción sensorial y a las funciones psicomotoras, provocando un alto número de accidentes con víctimas mortales.
- Mantener el vehículo en condiciones óptimas: el mantenimiento es fundamental para prevenir accidentes ocasionados por fallos mecánicos. El servicio de renting de ATHLON incluye el mantenimiento gratuito en todos los vehículos, asegurándonos de que todas las revisiones se realizan de manera oportuna para garantizar un funcionamiento eficiente y seguro.
- Los peatones tienen prioridad: respetar la velocidad y anticiparse a situaciones de riesgo es esencial, especialmente en áreas urbanas por las que transitan los peatones. Aunque algunos peatones no respeten las normas, es recomendable ceder y frenar para evitar situaciones de peligro.
- Cuidar nuestros estados de ánimo: la fatiga, el estrés y la distracción son compañeros peligrosos. Mantener la paciencia y una actitud responsable es fundamental para evitar riesgos en la conducción. Si no nos encontramos emocionalmente estables, es mejor no coger el coche.
- Respetar las señales de tráfico: las señales proporcionan información vital sobre obstáculos, accesos, direcciones y trayectos alternativos, por lo que es muy importante respetarlas para evitar poner en riesgo a todos los usuarios de la vía.
- Indicar nuestra maniobra: es obligatorio señalizar adecuadamente cada maniobra. El uso de los intermitentes y la revisión de los retrovisores al cambiar de carril o realizar maniobras, son prácticas fundamentales para prevenir accidentes.
- Adecuarse al estado de las carreteras: una conducción segura implica adaptarse a la vía, respetando las velocidades, las distancias y las condiciones de la carretera. Circular a una velocidad excesiva sin tener en cuenta al resto de vehículos que tenemos alrededor puede aumentar el riesgo de accidentes.
- Mantener una distancia prudente con el vehículo de frente: es esencial para prevenir accidentes y poder reaccionar de manera eficiente ante cualquier emergencia que pueda surgir en la carretera. La distancia recomendada varía según la velocidad: para 90 km/h, se recomiendan 50 metros; para 100 km/h, 55 metros; para 120 km/h, 66 metros; y para 130 km/h, 72 metros.
Siéntete seguro al volante con Athlon
El servicio de renting de ATHLON incluye asistencia premium con EUROPE ASSISTANCE. En caso de avería o accidente, si necesitas asistencia en carretera, simplemente tendrás que llamar a nuestro servicio 24 horas. Proporcionando asistencia integral tanto para ti como para los trabajadores de tu empresa.
Además, con el objetivo de prevenir accidentes por el uso del móvil, contamos con partners como SafeDrivePod. Esta aplicación analiza los movimientos del conductor sin depender del GPS, limitando las distracciones y optimizando la respuesta en caso de accidentes. Además, apaga la pantalla del teléfono mientras conduces.
